miércoles 26 de marzo de 2014
Nuevos tiempos para la educación primaria
Desde 2011, el Ministerio de Educación de la Nación impulsa la Política Nacional para la Ampliación de la Jornada Escolar en el Nivel Primario, que se propone haber alcanzado más de 5.000 escuelas en 2016. Pero esta política no comienza de cero: antes del impulso nacional, diversas provincias ya habían desarrollado modelos propios de jornada completa o extendida. El federalismo argentino ofrece un interesantísimo laboratorio para analizar los modelos y efectos de las distintas opciones de implementación, que desde CIPPEC quisimos explorar.
Durante varios meses, visitamos escuelas de cinco provincias argentinas que ya habían comenzado con sus propias políticas de extensión de la jornada, y recogimos los testimonios de sus directivos y docentes, con el propósito de reunir los aprendizajes sobre todo lo que puede lograrse con la extensión de la jornada escolar. Hoy tenemos el agrado de anunciarles que publicamos Nuevos tiempos para la educación primaria.
Escrito por Cecilia Veleda, el libro (que está disponible en .pdf, .epub y .mobi) intenta condensar los resultados de este trabajo, apoyado por UNICEF y el Ministerio de Educación de la Nación. Esperamos que toda provincia o escuela que esté ingresando a este fascinante encuentre en él un conjunto de herramientas fundamentales para aprender del pasado y de las experiencias en marcha. A continuación, transcribimos el prólogo de Andrés Franco, representante de UNICEF:
“La escuela primaria abre caminos y derechos en la vida de los niños y niñas. Es un espacio de socialización y encuentro con lo común, con los legados y la memoria histórica, con la cultura letrada, con el razonamiento científico. Es un espacio para recorrer senderos artísticos, desarrollarse en la educación física, aprender nuevas tecnologías e idiomas.
Para lograr estos ambiciosos objetivos, la escuela primaria necesita tiempo. A veces, cuatro horas de clases no alcanzan para tantos desafíos. A veces, los docentes quedan limitados en esas horas y tienen poco espacio para la reflexión profesional, el intercambio y la dedicación a cada alumno y su contexto. En todas partes, pero en particular en los contextos de mayor vulnerabilidad social, la ampliación de la jornada escolar es un camino lleno de esperanzas para el futuro de la infancia.
Implementar una política pública de extensión de la jornada escolar no es nada sencillo. Hay diversos modelos que fueron implementados en otros países de América Latina y en algunas provincias argentinas. Hay muchas lecciones para extraer de ellos. La Argentina encaró recientemente el desafío de ampliar la jornada escolar de los alumnos del nivel primario, a través de una política nacional articulada con las jurisdicciones provinciales. Es una medida alentadora que tendrá grandes beneficios para el futuro del país. Este libro tiene el propósito de reunir los aprendizajes sobre todo lo que puede lograrse con la extensión de la jornada escolar. Para ello, señala posibles problemas y alternativas.
Luego de visitar muchas escuelas con distintos formatos de ampliación del horario escolar, esta investigación es original y necesaria porque presenta el testimonio de los actores. Nadie es mejor que los docentes, directivos y alumnos para contarnos qué provecho se le puede sacar a la extensión del tiempo escolar.
Los resultados de este trabajo, que UNICEF se enorgullece en auspiciar junto con el Ministerio de Educación de la Nación, son valiosos tanto para el diseño de las políticas como para la planificación pedagógica dentro de las escuelas. Toda nueva provincia o escuela que esté ingresando a este fascinante proceso de ampliar su carga horaria cuenta de ahora en adelante con este conjunto de herramientas fundamentales para aprender del pasado y de las experiencias en marcha.
Es posible ampliar las esferas de expresión de los alumnos, sus posibilidades, sus proyectos futuros, sus capacidades de actuar más allá de los contextos sociales que los condicionan. El tiempo escolar puede ser una gran oportunidad para revisar prácticas, repensar la enseñanza y organizar de nuevas formas el clima escolar. Así, las nuevas horas de clase serán un eje clave en la garantía del derecho a la educación.”
Andrés Franco
Representante de UNICEF
Natalia
jueves 10 de abril de 2014
Me parece muy interesante la propuesta de jornada extendida en escuelas primarias. He trabajado en una de las escuelas primarias en Córdoba y realmente me gustó. El problema es que el sueldo que pagan es muy bajo y al profesor/maestro no le termina conviniendo el trabajo. Por la misma carga horaria conviene más para un profesor tomar horas en escuelas secundarias. Ojala esto se pueda revertir.
Alejandra
miércoles 16 de abril de 2014
Estoy en todo de acuerdo con la propuesta y trabajo en una escuela de jornada extendida o doble jornada con un proyecto propio si en algún momento quieren acercarse a conocerlo nos encantaría compartirlo, lo único que tiene de complejo es que es difícil la financiación sobre todo para las escuelas de clase media baja. Saludos.
marina
sábado 19 de abril de 2014
trabaje dos años en sexto y séptimo grado con jornada extendida ,y la experiencia fue positiva ,ya que es una escuela con una problemática socio-económica seria interesante que también 4° y 5° grado también se anexara al proyecto .saludos
betty suso
domingo 11 de mayo de 2014
La jornada propuesta es realmente positiva. permitiendo a todos los alumnos(21 de Sala de 5 a 7 grado)) fortalecer espacios curriculares,socializar y compartir, ya que es la unica oportunidad (en la escuela) debido a la distancia de cada familia puestera.Esc.N1-678 Agua de las Avispas
María Eugenia Cravero
lunes 5 de octubre de 2015
Creo que la jornada extendida no puede implementarse de la misma manera en todas las realidades. Vivo en un pueblo de 3500 habitantes, en la que hay una única escuela primaria. el proyecto Jornada Ampliada (pcia. de Santa Fe) implica que los alumnos coman en el comedor escolar de forma obligatoria. En un pueblo pequeño, donde no existe el horario corrido, esto atenta contra la vinculación familiar, ya que los horarios en que los niños están en la escuela coincide con el horario en el que los padres están en casa, ya que el almuerzo se realiza en los hogares en la gran mayoría de las familias. Atenta también contra el derecho de los padres, expresado en el Código Civil de la Argentina, de "alimentar a sus hijos según su condición y fortuna". Por lo tanto, creo que los proyectos de extensión de la jornada escolar debe implementarse atendiendo a la realidad sociocultural de cada lugar, respetando el derecho de los padres a elegir el almuerzo en la institución o no.
Otro punto es el de la calidad de la propuesta pedagógica. Tal como está llevándose a cabo en la provincia de Santa Fe, se parece más a un intento de contención social de algunos sectores que a mejorar la calidad educativa. Realmente, creo que es un proyecto a mejorar, los resultados no están siendo positivos, generando niños cansados, desmotivados en las actividades de la propuesta de extensión, aumentando los problemas de conducta, bajando su calidad nutricional en muchos casos, etc.
María Eugenia Cravero
lunes 5 de octubre de 2015
Creo que la jornada extendida no puede implementarse de la misma manera en todas las realidades. Vivo en un pueblo de 3500 habitantes, en la que hay una única escuela primaria. el proyecto Jornada Ampliada (pcia. de Santa Fe) implica que los alumnos coman en el comedor escolar de forma obligatoria. En un pueblo pequeño, donde no existe el horario corrido, esto atenta contra la vinculación familiar, ya que los horarios en que los niños están en la escuela coincide con el horario en el que los padres están en casa, ya que el almuerzo se realiza en los hogares en la gran mayoría de las familias. Atenta también contra el derecho de los padres, expresado en el Código Civil de la Argentina, de "alimentar a sus hijos según su condición y fortuna". Por lo tanto, creo que los proyectos de extensión de la jornada escolar debe implementarse atendiendo a la realidad sociocultural de cada lugar, respetando el derecho de los padres a elegir el almuerzo en la institución o no.
Otro punto es el de la calidad de la propuesta pedagógica. Tal como está llevándose a cabo en la provincia de Santa Fe, se parece más a un intento de contención social de algunos sectores que a mejorar la calidad educativa. Realmente, creo que es un proyecto a mejorar, los resultados no están siendo positivos, generando niños cansados, desmotivados en las actividades de la propuesta de extensión, aumentando los problemas de conducta, bajando su calidad nutricional en muchos casos, etc.