jueves 5 de julio de 2012

Nuevos tiempos para la educación primaria*

Jornada ExtendidaLos próximos años auguran una oportunidad inédita para la educación primaria. Luego de que en 2006 la Ley de Educación Nacional fijara el objetivo de extender la jornada en las escuelas públicas primarias, este año se avanza en esa dirección.

Gracias al apoyo financiero y en el marco de lineamientos del Ministerio de Educación de la Nación, las provincias están iniciando o profundizando la extensión de la jornada escolar en su territorio.

El nivel primario debe garantizar el acceso a los saberes prioritarios, sin los cuales la adquisición de saberes más complejos, la participación ciudadana y la inserción laboral futura quedan seriamente comprometidas.

A su vez, en un contexto en el que se complejiza el conocimiento, se transforman los intereses de la infancia y aumenta la desigualdad social, el nivel primario es hoy un espacio privilegiado para la apertura a nuevos mundos, ampliar y diversificar esa cultura compartida.

En medio de estas tensiones, y prácticamente lograda la cobertura total, existen todavía algunas tendencias preocupantes que deberán ser atendidas en los próximos años.

Entre ellas, persisten problemas en las trayectorias escolares de los alumnos: en 2009 (último año con datos disponibles), la tasa de sobreedad era del 21,4 por ciento.

El fracaso escolar está directamente ligado con dificultades en la enseñanza de los saberes esenciales, entre los cuales la lectoescritura es central.

Preocupa, también, cómo se agudiza el éxodo de alumnos del sector público al sector privado, que en 2010 congregaba al 25 por ciento de la matrícula.

Contar con más tiempo para enseñar puede ser una oportunidad para enfrentar estos desafíos. Más aún cuando se considera que la Argentina tiene menos horas anuales de instrucción que países como Chile, Brasil o Uruguay.

El tiempo parece especialmente insuficiente en las escuelas de contextos más críticos, donde cuatro horas de clases no alcanzan, porque la jornada está atravesada por los problemas sociales, los conflictos, el ausentismo de alumnos y docentes.

Pero la prolongación del tiempo cronometrado tiene que ser una ocasión para mejorar el tiempo vivido. La extensión de la jornada escolar puede ser una oportunidad para revisar el sistema de enseñanza, tan estable en el nivel primario.

Un buen diseño. Los estudios internacionales muestran que extender la jornada mejora la calidad, pero en muchos casos a un costo económico alto para un impacto bajo. Por eso, es clave un buen diseño para una política particularmente compleja, que puede adoptar modelos muy distintos.

Córdoba es una de las pocas provincias pioneras, que ya avanzó con la jornada extendida desde principios de la década de 2000.

Luego de la microexperiencia de 2000 y de la jornada ampliada de 2005 (que comprendió a unas 175 escuelas), desde 2010 la Provincia viene implementando la política de jornada extendida, que en 2012 alcanza a unas 444 escuelas.

La política suma dos horas más de clases dedicadas al inglés, la educación física, las artes, las ciencias naturales y la literatura, a través de las tecnologías de la información y la comunicación.

Focalizada en el segundo ciclo y con prioridad en el 6º grado, esta iniciativa tiene como objetivos principales fortalecer los aprendizajes, ampliar el horizonte cultural de los alumnos y mejorar el tránsito entre el nivel primario y el nivel secundario.

Las dos horas suplementarias parecen haber traído nuevos aires a las escuelas. Los docentes han encontrado una ocasión de desarrollo profesional gracias a la “especialización” en alguno de los cinco campos de conocimiento añadidos y han desarrollado novedosas estrategias de enseñanza.

De los testimonios de los directivos y docentes, se desprende un gran entusiasmo por la posibilidad de atraer a los alumnos con nuevas propuestas: inglés para todos, experimentos en laboratorios desempolvados, búsquedas y lecturas en Internet, campamentos, visitas a museos, danzas folklóricas y obras de teatro, entre otras.

Estas nuevas vivencias que permite el tiempo extra tuvieron efectos positivos no sólo en la motivación de alumnos y docentes: también parecen haber contribuido a fortalecer capacidades como la expresión oral, conocimientos y trayectorias escolares, en particular en el pasaje a la escuela secundaria.

Es temprano y aún hay mucho por hacer, pero estos primeros efectos son esperanzadores e invitan a pensar que el cambio es posible, también en la educación primaria.

* La nota fue escrita por Cecilia Veleda, codirectora del Programa de Educación del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) y fue publicada el jueves 5 de julio en el Diario La Voz del Interior.

 

Cantidad de Comentarios 7
Comentarios

María Claudia Pettinari

miércoles 11 de julio de 2012
Lamentablemente no es tan simple. Si la medida de aumentar las horas de clase para los niños de 6° grado, o cualquier otro grado de la escuela primaria, en los sectores económicamente y socialmente menos favorecidos de nuestra sociedad, no va acompañada de profundos cambios curriculares, organizativos y administrativos en el nivel inicial, primario y medio del sistema educativo nacional y provincial, entonces solo estaremos hablando de "nuevos" parches, sobre "telas viejas", Parches que lo único que hacen es estigmatizar más a la escuela pública, hoy "la escuela de los pobres", tal como se hizo en los 90´con el 3° ciclo de la EGB en el marco de la LFE. Hoy sufruimos las tristes consecuencias de lo que muchos aplaudían y votaban alegremente, sin saber.
Los sectores medios y altos que mandan hoy a sus hijos a escuelas de doble jornada, no lo hacen para que los chicos estén "mas horas" en la escuela. Esos padres quieren para sus hjos la mejor educación, por ello apuestan a una propuesta curricular de alta calidad, que se desarrolla en instituciones con alto equipamento tecnológico y con todo el personal especializado para atender a sus hijos, esa es una doble jornada educativa.
Poner más horas de clase en la escuela pública para que "los pobres" estén más tiempo en la escuela, solamente, sin inversiones edilicias, tecnológicas y de personal, es poner el carro delante del caballo, y seguir estancados. Hacen falta fuertes cambios en política curricular, que inlcuyan fuertes inversiones edilicias, tecnológicas y de personal en las escuelas y jardines públicos, para que los sectores más pobres reciban igual o mejor educación que los ricos. Más cantidad si, pero con calidad.
Los que menos tienen deben ser los que más y mejor educación reciban. Eso es justicia social, eso es igualdad de oportunidades, eso es distribución de la riqueza.
Atte.
María Claudia Pettinari
DNI 14830629
Larrea 514
Santa Fe
Argentina

viviam polini

jueves 12 de julio de 2012
En educación todos sabemos que los cambios son a largo, a corto y mediano plazo tengamos algunos datos para seguir analizando y avanzando. En la provincia del Chaco luego de haber construido una Ley Provincial consensuada por todos los actores, estamos trabajando en la construcción de los nuevos diseños curriculares, con trabajo en las direcciones de Nivel, en Cogresos Pedagógicos donde participan los distintos actores del sistema educativo. No me parece que tener más horas para los chicos en las escuelas, sea solamente para los pobres.
Estas políticas tienen una fuerte impronta que pretende dejar instalada la posibilidad de mejor eduicación para todos.
Más chicos en las escuelas con mejor educación, igualdad de oportunidades en el acceso al conosimiento, entonces estamos hablando más allá de la justicia social, hablamos de la" justicia curricular"
Es verdad que hay mucha y más inversión en educación, entonces tenemos el desafío de pensar cómo hacemos para lo que por muchos años, al menos en algunas provincias, ser docente era una salida laboral más, se transforme en un verdadero "SER DOCENTE", donde podamos mirar hacia rel centro de la educación, ante el sujeto NIÑO o JOVEN, sin su existencia el docente no tendría razón de ser.
Personalmente considero tenemos que empezar a pensar en planificar políticas educativas que avancen en esta dirección, es decir en ocuparse también en el otro actor necesario en el proceso educativo: el docente ."POR MAS Y MEJOR EDUCACION PARA TODOS"


ATTE
Lic. Viviam Polini
17356716
Chaco
Argentina

gustavo fernandez

jueves 12 de julio de 2012
Estimados participantes, voy a decir algo absolutamente controvertido. la escolarización forzada de los niños es un proyecto de trabajo para profesores, administrativos y demás burócratas. No como se suele creer un proyecto para la enseñanza y educación. No estoy de acuerdo con la escolarización forzada de los individuos. La escuela es un lugar denigrante para los chicos. Es mas el danño que se les hace que el bien que adquieren.
Acá les dejo un resumen de mis conclusiones sobre la escuela para que lea algún profesor con buen corazón y quiera cambiar algo desde adentro, que se transforme en una gotera dentro de un sistema inhumano...
Lo que enseña la escuela y produce:
Niños indiferentes al mundo de los adultos, sin contacto con el mundo real, por ende que crecen a medias, incompletos.
Niños sin curiosidad, que ni siquiera pueden concentrarse en lo que ellos elijen hacer...todo sustentado en una maligna pedagogía de timbres y campanas..."Bueno niños ahora pasemos a algo diferente"....
Niños con un pobre sentido del futuro, o de como el mañana está vinculado al presente...niños que viven en un presente continuo. Niños que no tienen sentido del pasado y de cómo el pasado ha dado forma y limita el presente, y de como el pasado limita sus propias posibilidades en el presente, para tomar sus propias desiciones.
Nños que carecen de compasión ante los infortunios, que se ríen de los débiles, que traicionan a sus amigos y familiares, que muestran desprecio por aquellos que muestran necesidad de ayuda con demasiada claridad. Niños condenados a estar solos, y a morir con miedo.
Niños que no pueden soportar la intimidad o la franqueza. Niños que se disfrazan detrás de personalidades apresuradamente fabricadas a partir de ver la televisión y de otros indicadores de distorsión de la naturaleza humana. Detrás de las máscaras se esconden las almas lisiadas. Consciente de ello, evitan el escrutinio exigir relaciones íntimas, ya que expondrá su superficialidad de los que tienen algo de conciencia.

Niños materialistas que asignan un precio a todo y que evitan pasar tiempo con personas que no prometen un retorno de la inversión inmediata. Los niños que siguen el ejemplo de los maestros de escuela, la clasificación de todo:. "El mejor", "más grande", "los mejores", "lo peor" Todo lo que simplifica en categorías simplistas por el juicio implícito de un precio en efectivo, considerará una guía infalible para el valor.
Niños dependientes que crecen traicioneros, adultos aterrorizados, dependientes, pasivos y tímidos frente a nuevos desafíos. Y, sin embargo esta condición incapacitante a menudo se oculta bajo una pátina de bravuconería, ira, y agresividad. Niños que crecen para convertirse en adultos infantiles, e irresponsables...por supuesto, excelente caldo de cultivo para que el marketing les venda cosas que no necesitan...
Y bueno así podría seguir hasta la madrugada...estimados amigos...la escuela como institución para realizar individuos seguros de sí mismos, con coraje, curiosos, independientes intelectual y emocionalmente...no sirven...sirve para todo lo contrario y quizá la clave está allí...que lo que la escuela se propone la realiza a la perfección: producir adultos sumisos, conformistas y que consuman más de lo que necesitan...ta que eso es lo que pide el mercado laboral...gran paradoja...
gracias...

Sonia

jueves 12 de julio de 2012
Hablemos de…Educación…
El Ejemplo de Finlandia y los sinsabores de la educación Latinoamericana. (Por Leopoldo S. Perales)
Colaboración especial para el periódico “El Valle”

¿Qué es necesario poner en el centro del sistema, los conocimientos o el alumno ?…Y la maestra Kirsti expresó: “Cuando un alumno no aprende pienso que algo está fallando en mi forma de enseñar”.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Es un organismo que desde hace varios años ha diseñado un Programa Internacional para la Evaluación de los Estudiantes, (Program for International Student Assessment) mejor conocido como PISA por sus siglas en inglés,
Este programa, evalúa hasta qué medida están bien preparados los jóvenes de 15 años para enfrentarse a los desafíos de las sociedades del conocimiento de nuestra época.
Cuando se realiza esta evaluación, en cada país que participa se selecciona una muestra de entre 4.500 a 10.000 alumnos que deben responder a exámenes escolares y a cuestionarios sobre el medio socioeconómico del que proceden.
El instrumento PISA se aplicó por tercera ocasión entre los países miembros de la OCDE y también en países no pertenecientes a esa organización. Entre los países de la OCDE mejor clasificados destacan (Australia, Canadá, Finlandia, Irlanda y Nueva Zelanda); Y Entre los países que no pertenecen a la OCDE, los que mas se destacan son los alumnos de Hong Kong, Japón y República de Corea.

Por otra parte, los alumnos de los países de América Latina muestran un rezago bastante considerable en lo que respecta a las competencias de comprensión de la lectura, ciencias y matemáticas.

El estudio PISA, arroja como resultados de “las mayores disparidades en las aptitudes de lectura en los países de Argentina, Brasil, Estados Unidos, Chile, Israel, México, Perú y Portugal. Esto nos motiva a hacer una reflexión:
¿Qué están haciendo los Finlandeses que se han perfilado en estas evaluaciones como los mejores del mundo?. Los resultados publicados del estudio realizado por la (OCDE) en 2003 a mas de un cuarto de millón de alumnos de todo el mundo, reflejan que los estudiantes de Finlandia están muy por encima de los otros 40 países miembros evaluados en lectura, matemáticas y ciencias, y también “muy arriba del alumno medio de las naciones afiliadas a la OCDE”.
Verdaderamente llama la atención el ejemplo educativo Finlandés, Veamos un poco de su sistema educativo:
En los últimos años de la década de los 70´s, los maestros empezaron a adoptar un sistema “centrado en el alumno” brindando más atención a las necesidades individuales de los estudiantes. En primer lugar se cancelaron los exámenes que se aplicaban a los niños a los 10 años y se permitió que los niños siguieran juntos en las mismas escuelas hasta que cumplieran los 16. Después, en la década de los años 80, se permitió que en el mismo salón de clases podían asistir alumnos de todos los niveles de habilidad, y en 1994, se descentralizó la administración escolar y se permitió a las escuelas y maestros la libertad de establecer sus prioridades de enseñanza.


-El 95% del sistema educativo de Finlandia es estatal, Hay 4000 escuelas primarias y 580.000 alumnos.
-La enseñanza es gratuita y obligatoria hasta los 16 años de edad.
-La carrera docente es muy exigente y sólo ingresa el 20% de los aspirantes.
-Todos los maestros pasaron por la universidad. El 80% son mujeres.
-Desde los años 90 las escuelas son municipales, con una fuerte ayuda económica del gobierno central.
-Hay un consejo de evaluación de las escuelas, que mide la calidad de la enseñanza.
-El gobierno de Finlandia destina el 14% de su presupuesto a educación. En la Argentina, el índice es del 7,5%. Y en México es de 6.3 %.

En “Los mejores de la clase” de Fergus Bordewich, Kimmo Sundstrom, director de una escuela de 280 alumnos, dice: “cada alumno elabora su propio plan de estudios anual; cada uno, ayudado por sus padres y maestros, establece las metas que desea alcanzar, y así la motivación se mantiene alta. Si alguno requie¬re apoyo especial en matemáticas, lo recibe; si otro avanza más aprisa que los demás en lenguaje, se le alienta para que siga adelante”.

¿QUÉ ESTÁN HACIENDO BIEN los finlandeses? La razón de sus logros no es el derroche de dinero: el gasto de Finlandia en educación primaria y secundaria es un poco mayor al promedio europeo, pero menor al de algunos de sus vecinos nórdicos. Finlandia tampoco ha recurrido a las evaluaciones exhaustivas, cargas de trabajo más pesadas, readopción de métodos de enseñanza del pasado o aplicación de medidas disciplinarias muy severas.

Los niños finlandeses empiezan su educación escolar a los siete años, casi todos en escuelas públicas, y en promedio dedican unas 30 horas a la semana al trabajo escolar, incluidas las tareas en casa.

Los problemas típicos o clásicos de las escuelas de la mayoría de los países son relativamente muy raros en Finlandia. Aunque el hostigamiento entre condiscípulos, el consumo de drogas y la falta de respeto a los maestros sí existen, se procura resolverlos y se resuelven lo antes posible. El ausentismo de alumnos no es común: de alrededor de 62,000 jóvenes que cada año terminan la enseñanza media, sólo 1000 abandonan la escuela, y la mitad de éstos tarde o temprano reanudan sus estudios.

Los maestros se cuentan entre los mejor ca¬pacitados del mundo. Aunque sus sueldos no son exorbitantes, la profesión goza de gran prestigio. Las universidades aceptan sólo a uno de cada siete solicitantes a puestos docentes, rigor selectivo aún mayor que el aplicado a los aspirantes a abogados y médicos. “Esta profesión es tan difícil, que consideramos apto para ejercerla a cualquiera que termina la carrera docente, porque lo difícil es terminarla”, dice Riitta Sarras, asesora del Sindicato de Educadores, que representa a los maestros de Finlandia.

Los maestros disfrutan de un alto grado de autonomía, pues tienen libertad de usar los métodos de enseñanza que prefieran, elaborar los planes de estudio para sus grupos de alumnos y elegir los libros de texto para los cursos (o no utilizar ningu¬no). Una vez que se contrata a los maestros, no se les somete a inspecciones ni a evaluaciones periódicas. Richard Cousins, maestro de matemáticas en Finlandia, dice: Aquí, el sistema confía en uno, y nosotros somos responsables”.

No se usan formas estandarizadas de evalua¬ción. Los críticos finlandeses afirman que los exáme¬nes generan inútiles presiones de tiempo y constituyen un castigo para los alumnos que quieren aprender a su manera. “En muchos países se cree que el aprendizaje mejora con la aplicación frecuente de exámenes”, dice Sarras. “Nosotros creemos lo contrario: la evaluación excesiva lleva a los maestros a enseñar para los exá¬menes, y muchos aspectos del aprendizaje no pueden evaluarse así”.

Se enseña a los estudiantes a autoevaluarse. “Enseñamos a los niños desde el nivel preescolar para que se autoevalúen”, dice Kimmo Sundström. “Esto los ayuda a hacerse responsables del trabajo que realizan y cuando asumen la responsabilidad trabajan con más libertad.

El ambiente escolar es flexible y tolerante. En las escuelas finlandesas no se obliga a los alumnos a llegar antes de que empiecen las clases y no hay toques de campana que marquen el principio y el final de cada clase. “El exceso de autoridad genera resentimiento”, dice Richard Cousins. “Aquí los chicos son responsables y res¬petuosos porque les damos la libertad de venir. No vienen sólo porque se les ordena”.

“Nunca decimos ‘estás mal’, porque eso avergüenza a los alumnos y socava su deseo de aprender”, dice Kirsti. “Todos son libres de cometer errores. Es normal no aprender en ocasiones, o hacerlo lentamente. Les decimos a los muchachos que comparen sus logros sólo con los anteriores, no con los de los demás”. “Cuando un alumno no aprende”, expresa, “pienso que algo está fallando en mi forma de enseñar”.

Los países miembros de la OCDE, invierten en educación el equivalente al 5.8 por ciento de su producto interno bruto (PIB), en promedio. México esta por encima de esa media, ya que su gasto en educación como porcentaje del PIB es de 6.3 por ciento.

En cuanto al examen PISA, que en 2003 se aplicó a estudiantes de todos los países de la OCDE para evaluar su desempeño, México obtuvo la puntuación media más baja en matemáticas, ésto significa que más de 60 por ciento de los estudiantes mexicanos tienen capacidad insuficiente para las mate¬máticas.

En México, por otro lado, el número de alumnos que cada maestro atiende es alto en comparación con el de otros países. Por ejemplo, un profesor de secundaria enseña a 32 estudiantes en promedio: más del doble de la me¬dia de la OCDE, que es de 14 alumnos por maestro.
Las diferencias en educación entre Finlandia y México son muchas. Mien¬tras que un estudiante mexicano de 15 años dedica 1058 horas al estudio en un periodo escolar ordinario, uno finlandés, de la misma edad, dedica 858 horas, es decir, cerca de 19 por ciento menos tiempo.

La calidad de la educación es obra de muchos factores y no sólo de medidas educacionales.

Cecilia Veleda

miércoles 18 de julio de 2012
Muchas gracias a todos por los interesantes comentarios, que dan cuenta de la complejidad y los riesgos de la política de extensión de la jornada escolar. Coincidimos en que sólo vale la pena implementarla si se hace muy bien. Es decir, si ese tiempo suplementario sirve para explorar nuevas propuestas pedagógicas que convoquen a los chicos, estimulen sus ganas de aprender, les abran nuevos espacios de expresión y les permitan acceder a los saberes fundamentales. Los propios testimonios de muchos docentes nos indican que las horas "extra" de la jornada extendida, exentas de las presiones por cumplir con el programa, evaluar y acreditar, pueden ser la ocasión para una mayor creatividad pedagógica, la revisión del vínculo con los alumnos y la mejor coordinación con el resto de los docentes. Creemos que, bien distribuida, con las adecuaciones edilicias necesarias, con un buen diseño curricular, con buena capacitación y muy acompañada por el Estado una vez en marcha, la extensión de la jornada escolar puede ser la ocasión para trastocar el molde homogéneo y anquilosado de la escuela primaria. Por supuesto que para esto el Estado debe actuar como un Estado Pedagógico, y no como un Estado Administrador, dedicado a sumar más horas y cargos sin una direccionalidad precisa. Nuestro compromiso desde CIPPEC es apoyar al Estado en esa tarea, porque confiamos en el poder transformador de la escuela y de la política educativa.

Muchas gracias nuevamente por el debate.

laura medina

jueves 2 de agosto de 2012
Trabajo en una escuela de Ed. Espècial....tanto en Primaria Común como en Especial se observa que si bien hay una batería legal que ampara el derecho de los niños/as a tener una educación de calidad, en muchas ocasiones, por la coyuntura social - familiar- son necesarias intervenciones del Àrea de Salud Integral y de Desarrollo social pero no se logran. Hay ejemplos de niños con fracaso escolar en que las familias no cumplen con tratamientos ni con básicos controles de salud, y las Defensorías no consideran como casos de riesgo. Saben de algún trabajo de investigación que refleje cómo se articulan las areas de Educación.- Salud y Desarrollo Social en la Ciudad de Bs. As. en la actualidad?????

Mario Lacase

lunes 1 de octubre de 2012
Mi hija es escolta en sexto año, participa junto a sus tres hermanos menores y su madre y padre de la mesa familiar a la una de la tarde, luego realiza las "tareas" del colegio, a la cual la ayudo ante una duda o mi esposa. A la tarde tiene inglés en un instituto privado, y hace patín artístico.
POR QUE AHORA TENGO QUE PRIVARLA DE TODO ESO, sobre todo de estar en "su casa", ya demasiado con que acortamos el primario en un año ingresando a la secundaria con 11-12 años. Por favor ¡ basta de obligar en la Argentina !, entiendo que la idea es buena, pero a ver si se animan a que sea optativo.
Estoy de acuerdo con los bloggeros que dicen que hay que aumentar la calidad y no la cantidad, sin recursos los TICs la van a desarrollar con una "budinera" a ver si captan la señal de internet:
Muchas gracias.
Ing. Agr. y Prof. Mario Lacase

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