La escuela busca al niño

Colombia, desde 1998

La escuela busca al niño (EBN) es un programa que busca la inclusión educativa de los niños, niñas y jóvenes que no asisten a la escuela. Sus orígenes se remontan a un proyecto de innovación pedagógica implementado por la Universidad de Quindío, en la ciudad de Armenia, que luego fue recogido por UNICEF y, con este apoyo, implementado en otras tres ciudades (Yumbo, Ipiales y Medellín).

En cada ciudad, el programa es implementado por una alianza interinstitucional entre organismos estatales, organizaciones no gubernamentales, universidades y UNICEF. En Medellín, por ejemplo, EBN es un programa de la Secretaría de Educación del Municipio, en alianza con la Universidad de Antioquia, UNICEF y la Corporación Región, una ONG implementa el proyecto en el terreno.

La implementación del programa se dividió en primera instancia en tres fases claramente determinadas: 1) la búsqueda activa de niños, niñas y jóvenes no escolarizados, 2) el trabajo pedagógico y la recomposición psicoafectiva de los niños y jóvenes, y 3) el reingreso en la escuela. Sin embargo, la experiencia demostró que el acceso de los niños y jóvenes a la escuela no era suficiente, ya que las prácticas escolares tradicionales son insuficientes para lograr la permanencia en la escuela y una inclusión efectiva. De esta forma surgió una cuarta fase fundamental de la propuesta: el acompañamiento pedagógico de los niños y jóvenes en la escuela, que incluye el trabajo con las instituciones y sus docentes.

Si bien el programa presenta una estrategia global común en todos los casos, el marco teórico, las actividades y la duración de cada una de las fases mencionadas dependen de cada ciudad y de cada ONG que implementa el programa.

En EBN Medellín, por ejemplo, la búsqueda de niños y jóvenes se realiza hasta el día de carnaval, cuando todos los niños y jóvenes no escolarizados que fueron encontrados son convocados a una jornada de encuentro con la intensión de comenzar a tejer una relación con ellos y generar la confianza necesaria. En estas jornadas, así como en el resto de las actividades, la relación afectiva entre docentes y niños/jóvenes aparece como clave.

EBN de Medellín se enmarca en la pedagogía social freiriana. Se trabaja con Unidades Integradoras de Aprendizaje (UIA) donde se integran lo académico, lo socio-afectivo y lo relacional. El trabajo con los niños y jóvenes se realiza en lugares que son familiares para ellos, lugares cercanos a sus casas, incluso en la calle. Estos espacios fueron denominados “espacios de aprendizaje” por los participantes de la experiencia. Su cercanía con los hogares permitió incluir las visitas domiciliarias como parte de los dispositivos de trabajo, para vincular a las familias con el proceso.

En estos “espacios de aprendizaje”, la jornada comienza con un saludo de bienvenida y los docentes realizan un sondeo de saberes previos. Luego se establecen “acuerdos de convivencia” y se determina junto con los niños/jóvenes qué se va a hacer en la jornada y qué se va aprender. A continuación se realizan actividades denominadas ABC (Actividades Básicas Complementarias), que son actividades lúdicas relacionadas con la lectura de cuentos, cantos de bienvenida, etc. Luego, durante dos horas, la tarea se focaliza en el aprendizaje académico. A continuación, durante media hora, se realizan actividades de expresión corporal y, por último, se realiza un seguimiento de los aprendizajes alcanzados y se establecen los acuerdos para el próximo encuentro.

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